El Marakaná se llenará este miércoles 6 de noviembre para recibir al FC Barcelona, en un encuentro que se prevé vibrante gracias al clima hostil que impondrá la afición local. Las entradas se han agotado, por lo que cerca de 52.000 aficionados del Estrella Roja alentarán a su equipo para conseguir sumar algún punto que les aleje de las últimas plazas de la clasificación.
Así pues, se espera que el Estadio Rajko Mitić, también conocido como Pequeño Maracaná o Marakaná en la propia Serbia, puesto que llegó a una capacidad de 110.000 espectadores sea una auténtica olla a presión. Los jugadores necesitarán el apoyo de su afición en un duelo complicadísimo para los locales.
Pese a este clima de tensión, en esta ocasión no podrán producirse enfrentamientos entre las aficiones, ya que la UEFA sancionó al FC Barcelona prohibiéndole vender entradas a sus aficionados para partidos a domicilio. Esta multa se debe a que uno de los hinchas que se desplazó a Mónaco en la primera jornada de la Champions League mostró una pancarta de apoyo a Hansi Flick cuya grafía y diseño tenían claras reminiscencias nazis.
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De este modo, el Barça tendrá el reto de ganar como visitante en la Liga de Campeones, algo que le ha costado en los últimos años. La temporada anterior lograron dispar los fantasmas, enciendo al PSG en el Parque de los Príncipes, pero en la primera jornada de esta edición, los azulgranas volvieron a pinchar con la derrota en Mónaco. No obstante, el equipo de Hansi Flick buscará una nueva victoria para consolidar su buen momento en Europa y subir puestos en la clasificación para colocarse entre los ocho primeros.