La afición del Espanyol mostró este jueves su enésimo rechazo a la junta directiva del club comandada por Chen Yanseng, empresario chino que dirige la entidad desde 2016 y cuya nefasta gestión deja un evidente malestar entre la parroquia perica.
Más de 100 aficionados se reunieron delante de la embajada de la República Popular China en Barcelona sobre las 19:00 horas, situada en la Avenida del Tibidabo, en señal de protesta a la dirección del mandamás del equipo. Bajo el lema ‘#ProuChen’, las redes sociales se inundaron de mensajes contra la actual directiva tras la última derrota del equipo.
El Espanyol se llevó un repaso del Girona en Montilivi (4-1) en la pasada jornada y acumula cuatro tropiezos consecutivos en liga, incluyendo una dolorosa derrota en el derbi de Barcelona ante el Barça (3-1) y una goleada en Bilbao (4-1). Estos paupérrimos resultados han hecho saltar estallar una afición que lleva muchos años pidiendo la salida de Chen y todo su séquito de los despachos del club, con una gestión económica y deportiva nefasta que los ha llevado a descender hasta en dos ocasiones en el pasado lustro.
‘Basta’ a una gestión tétrica
La manifestación, que no causó ningún incidente, dejó cánticos como los de “Chen vete ya”, “Directiva dimisión” o “Diles que se vayan de una p*** vez”, muestras evidentes del malestar que se respira en los aledaños del RCDE Stadium, que esta temporada vuelve a tener pesadillas con la segunda división española. Una de las asistentes fue Rosario Mesas, socia de 41 años de edad que “exigió la venta del club” y afirmó que Chen “ha descapitalizado el club con fichajes desastrosos. Hoy es el principio de una oleada de protestas que va a haber. En el próximo partido seguiremos. Está a miles de kilómetros, no le importa el club y su representante aquí en Barcelona es un inútil. Nos está hundiendo, tenemos miedo a desaparecer”.
Un socio más joven es David Pina, de 17 años, que también hizo acto de presencia ante el Consulado de China. “Venimos hasta aquí porque es un lugar donde el mensaje le puede llegar a Chen. Sabemos que lo que le llega a Mao no le llega a Chen. Por eso estamos aquí, para enviarle el mensaje de que el club no está muerto. Pensaba que seríamos más”.
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“A ver si encontramos un inversor que sepa de futbol y nos ayude a salir de esto” opinaba otro perico, que añadía que el club “necesita jugadores nuevos y que crean en un proyecto nuevo”. La realidad es que los aficionados del Espanyol se hicieron notar en esta protesta en un momento decisivo a nivel deportivo. El próximo sábado 30 de noviembre reciben al Celta de Vigo en un choque crucial para salir de los puestos de descenso. Ahora son penúltimos con 10 puntos, y una victoria ante el cuadro gallego ante su afición podría darle alas a un Espanyol que está jugando con fuego. Pitos a la directiva no faltarán.