Ocho goles en los últimos cinco encuentros de Liga ha encajado el FC Barcelona (1,6 de media). 11 goles en los 12 partidos (0,9 de media) anteriores había recibido el cuadro de Flick, que ha bajado prestaciones en ese apartado. Es evidente que el equipo ha dado un paso atrás, ha perdido fiabilidad, le generan muchas más situaciones de peligro.
Ante la UD Las Palmas, el cuadro ‘pío pío’ fue capaz de marcar un gol, el 1-2, en apenas 3-4 contactos de balón. Una transición tan rápida como cómoda y sonrojante para la defensa barcelonista, altamente elogiada hasta hace apenas un mes. Iñigo Martínez, un káiser a lo largo de tres primeros meses de competición excelsos, está dando muestras de necesitar un descanso. Igual que Koundé, que ha salido en la foto de varios goles en las últimas semanas.
POTENCIA Y CORAZÓN
Y en medio de esta pequeña ‘minicrisis’ defensiva irrumpe la figura de Ronald Araujo. El central uruguayo, de baja desde el pasado mes de julio, regresa a la acción cuando más le necesitan Flick y el barcelonismo. Uno de los ‘jefes’ del Barça de las últimas dos temporadas, todo potencia y corazón, vuelve y todo apunta a que lo hace para ser protagonista.
Desde mediados de julio, cuando se lesionó en la Copa América con Uruguay, el zaguero ha estado KO. Operación, recuperación y readaptación para volver a estar a las órdenes de Flick. El técnico germano ya avisó que si nada se tuerce viajará a Dortmund y que su reaparición en el verde con minutos y protagonismo será ya el sábado ante el Leganés.
PERFIL DISTINTO
En un contexto complicada como el actual, el foco se cierne todavía más sobre un Ronald que viene recibiendo los ‘mimos’ de fisios y preparadores durante muchas semanas. Y al que Flick está cuidando. Quiere que se empape cuanto antes de una filosofía que implica muchos riesgos, mucha concentración. Una sincronización brutal y armónica.
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Sesiones de vídeos, individualizadas. Hansi es consciente de que el charrúa representa un perfil de central distinto del que ha podido disponer hasta ahora. Iñigo y Cubarsí tienen una salida de balón limpia, capaces de romper líneas con desplazamientos y pases verticales. Su fuerte no es la velocidad y la potencia. Algo que sí puede aportarle Araujo.
Ronald ha mejorado mucho a la hora de salir desde atrás con el esférico, pero está lejos de las prestaciones que ofrecen el de Estanyol y el de Ondarroa. Eso sí, con la defensa adelantada y un espacio tan inmenso atrás, es el mejor corrector posible si el rival es capaz de superar la ‘trampa’ del fuera de juego.
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CAPITÁN
A todo esto, hay que recordar que Ronald Araujo es actualmente el primer capitán del Barça. Marc-André Ter Stegen está lesionado y tardará en regresar e inmediatamente va el uruguayo. De Jong es el tercero, por lo que siempre que esté Ronald sobre el verde debería portar el brazalete.