La actriz madrileña Elisa Mouliáa Ruiz de Elvira, de 35 años, presentó en la noche de este jueves una denuncia en comisaría contra el ya exportavoz parlamentario de Sumar, Iñigo Errejón, relatando un delito de acoso sexual. La denuncia se suma a otras dos presentadas en comisarías por casos del mismo tenor, que han terminado provocando la dimisión del dirigente político de izquierda.
Los hechos que refiere la denuncia de Elisa Mouliáa -a la que ha tenido acceso este diario– ocurrieron, según el relato que ha hecho a la Policía Nacional, “a finales del mes de septiembre del año 2021”, en la calle Alonso Cano de Madrid. Esos hechos consisten en dos agresiones sexuales en la misma noche, con besos y tocamientos a los que, según la versión de la denunciante, ella se negó continuamente, si bien no los ha denunciado hasta ahora.
Errejón y ella habían ido a tomar una cerveza a un bar del barrio de Ópera, después de la presentación de un libro de Errejón, acto al que el político había invitado a la actriz. En un momento dado del encuentro, la mujer indicó a Errejón que tenía planeado acudir a una fiesta montada en casa de unos amigos, Soraya G. y Borja V. Errejón se apuntó y pidió un coche. En el trayecto, en el interior del vehículo, “Iñigo cambia de actitud y torna en una actitud dominante, indicando a la dicente que le iba a imponer tres reglas”, recoge la denuncia.
Primera agresión
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La primera regla fue “que no se alejase mucho de él esa noche”. La segunda “que si lo hacía, no fuese más de 20 metros de él y regresase en un minuto”. Y la terdera, “que esa noche le diese un beso“. El atestado policial dice que Elisa Mouliáa “se sintió violentada y cortada si bien decidió guardar silencio por ser quien era”.
En el ascensor, llegando al lugar de la fiesta, Errejón -siempre según la versión contada por la mujer a la Policía- le dijo: “La tercera regla la voy a domper ahora mismo”. En ese momento “agarró a la denunciante fuertemente de la cinutra y la comenzó a besar introduciéndole su lengua en el interior de su boca, dejándola sin respiración y de una forma violenta”.
En ese momento, la mujer no tomó la decisión de irse o dejar a Errejón o pedir ayuda. Fueron a la fiesta “donde bailaron, bebieron y charlaron con los asistentes”, dice el texto del documento policial. Cuando estaba bailando una canción de Los Secretos con un amigo suyo, el hecho “debió producir un ataque de celos de su acompañante” y Errejón “la agarró fuertemente del brazo y la llevó por la fuerza durante unos seis metros por un pasillo hasta introducirla en el interior de una habitación de la casa”.
Según la denuncia, tras cerrar con pestillo la puerta, el supuesto agresor empezó a “besar y tocar a lacidente por distintas partes de su cuerpo”. La denunciante no ha especificado a la Policía si fue por encima o por debajo de la ropa, aunque sí el detalle de que “le llegó a quitar el sujetador”. En su denuncia, Elisa Mouliáa asegura que esos hechos se produjeron sin consentimiento suyo.
En su comparecencia ante la Policía, la actriz refiere otros momentos de esa escena que indican que Íñigo Errejón tenía intención de consumar un acto sexual durante unos veinte minutos, pero que ella le dijo que querí seguir en la fiesta. El político consintió finalmente en que saliera de la habitación, pero poniéndole la condición de que debían irse casi inmediatamente porque había pedido otro coche. Cuando el vehículo llegó, le puso la chaqueta a la mujer y salieron de allí.
Segunda agresión
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La denuncia relata que, en el camino de vuelta, Íñigo Errejón recibió una llamada de su domicilio para contarle que su hija tenía fiebre, y que ese asunto no le preocupó.
A pesar de lo ocurrido, la denunciante acompañó a Errejón a su casa, y allí, según su versión, este “sin mediar palabra comienza nuevamente a besar a la denunciante en los labios, mientras la realizaba tocamientos”. En un momento de esta nueva agresión, ella le dijo a él: “Iñigo, solo sí es sí. Parece mentira que me esté pasando esto contigo”.
En la toma del tetimonio, la Policía preguntó esta pasada noche a la actriz si se siente víctima de un delito sexual, y la actriz respontió que sí.
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Fuentes de Interior refieren quie