Chema Puente, el histórico rabelista cántabro, conocido por ser uno de los máximos representantes de la cultura regional, ha fallecido a sus 73 años. El nacido en el pueblo de Cueto, Santander, ha dejado el plano terrenal, pero permanecerá en las memorias de miles de cántabros gracias a su voz, la cual “seducía al oyente transportándolo a otros tiempos, cuando la voz era la máxima protagonista de la tradición popular“, según sus oyentes.
Con numerosos álbumes individuales, tales como De la machina a la braña, Puente se encargó no solo de encantar a sus oyentes, sino también de defender y promover la cultura musical. Su trabajo no solo se limitó a Cantabria, sino que participó en múltiples encuentros musicales y festivales a lo largo de todo el país para ampliar su legado.
También llegó a formar parte del grupo Trío Cantabria junto a Benito Díaz y Begoña Lozano, revitalizando las raíces de la música cántabra. La labor de Puente siempre buscó reflejar su amor y respeto por todo lo alusivo a su hogar, transmitiendo su cariño no solo a través de las melodías sino también como divulgador y maestro.
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Aunque su pérdida deja un vacío en la cultura cántabra, su paso por la misma sin lugar a dudas ha dejado huella, y continuará marcando la vida de todos aquellos que, como Puente, sientan vívida y apasionadamente sus orígenes, conservándolos y compartiéndolos a través de la música y cualquier medio afín.