Rúben Amorim se despide hoy del banquillo del Sporting CP en un desplazamiento siempre complicado a Braga (19.45 horas). El entrenador viajará a Manchester en los próximos días para tomar las riendas de un United que necesita aires frescos y savia nueva en la dirección deportiva. Los ‘leones’ intentarán mantener su inmaculada dinámica liguera, donde cuentan todos los encuentros por triunfos, y despedir así al preparador por todo lo alto. El cuadro lisboeta suma 30 puntos en diez encuentros disputados, apenas encajando tres goles.
Una de las claves del excelente rendimiento sportinguista es, cómo no, Viktor Gyökeres. El delantero sueco está siendo una de las grandes sensaciones, tanto a nivel doméstico como en el panorama continental. Sus 21 goles (16 en liga y 5 en Champions) avalan el ‘hype’ por un futbolista que hasta hace unos meses era prácticamente desconocido para el gran público.
Gawkers celebrate their victory over Manchester City / EFE
El escandinavo tendrá dónde elegir. Las proposiciones se amontonan y el teléfono de su agente echa humo. Se antoja hartamente complicado que el Sporting CP pueda retener a un delantero que se está mostrando tan determinante, especialmente porque la puntería en el fútbol está muy solicitada y cotizada.
¿Traspaso al Manchester United?
La llegada de Amorim a Old Trafford había alimentado los rumores del posible fichaje de Gyökeres por los ‘red devils’, algo que el propio entrenador se encargó de desmentir en la previa del encuentro frente al Braga. “No, no y no. No puedo especular con eso en este momento. Para mí fue muy duro salir del club. Si empezamos a hablar de la situación de Gyökeres voy a tener problemas. Esta es mi ciudad, mi país. Voy a respetar eso. Viktor (Gyökeres) tiene que quedarse en el Sporting hasta final de temporada y después su vida, muy probablemente, irá para otro lado“, confirmó Rúben Amorim.
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Está claro que Viktor Gyökeres será uno de los nombres del verano, con los gigantes del fútbol continental peleándose por reclutarle. La entidad lisboeta tendrá la última palabra, con un precio de salida que rondaría los 60 millones de euros.