El maltrato deportivo, económico y social que Peter Lim lleva imponiendo en el Valencia CF desde que adquirió la mayoría accionarial en el año 2014 está alcanzando un punto de hartazgo y tensión máximo. Las consecuencias son cada vez más graves y esta temporada está más cerca que nunca de producirse el estallido definitivo en forma de descenso, que sería la culminación definitiva a la obra de hundimiento del mandatario singapurense.
El valencianismo lleva muchos años alzando la voz con protestas y manifestaciones que, en algunos casos, han dado la vuelta con imágenes impactantes como la del 21 de mayo de 2022 cuando la afición vació casi en su totalidad Mestalla mientras el equipo disputaba el último partido de liga ante el Celta de Vigo. A la movilización de los aficionados se han unido a lo largo de los últimos años grandes representantes de la entidad valencianista, tanto máximas leyendas del club como exentrenadores que han podido vivir en primera persona lo que significa formar parte de un club que ha perdido por completo el rumbo.
Además, el hartazgo de grandes voces blanquinegras no es ni mucho menos nuevo, viene incluso del primer lustro de Lim en el club cuando el efecto Meriton, si bien ya empezaba a causar estragos, todavía no era ni la mitad de dramático que en la actualidad. “Me da pena ver al Valencia en esta situación, el club se vendió por problemas económicos y no deportivos y la deuda sigue siendo la misma”, llegó a expresar Fernando Gómez Colomer sobre el punto muerto que sufría y sufre la situación económica. José Manuel Sempere, por su parte, ya avisaba en los primeros años de Lim de “falta de respeto para los aficionados y la entidad” porque “se están perdiendo los valores”. “Lim debería cambiar la gestión del club. Se necesita gente que conozca la Liga y la ciudad”, dijo en su momento Gaizka Mendieta.
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Una de las mayores leyendas del valencianismo, Mario Alberto Kempes, ha sido una de las personalidades más activas con constantes críticas a Lim en los últimos años. Recientemente, en un comunicado en sus redes sociales, hizo una petición abierta al singapurense: “Si no está dispuesto a tomar las riendas de manera efectiva , le solicito de un paso al costado. No podemos permitir que la grandeza de este Club se pierda en la mediocridad”. En ocasiones anteriores también llegó a afirmar que “(Meriton) no solo están destrozando al equipo sino también al club, ese es el problema” o que “el error más grande fue que esta gente agarrase este compromiso sin saber donde se estaban metiendo. El Valencia se ha convertido en una casa de locos”.
Santi Cañizares, el mejor portero de la historia del club, ha sido el último en despacharse con Meriton reproduciendo un fuerte mensaje en contra de Peter Lim y su gestión. “Como gestor es un incapaz y como persona es un arrogante, lleva cinco años sin venir aquí, sin dar una explicación, sin dejarse asesorar por nadie, con cero empatía con la gente”. “El Valencia ya ha perdido la categoría, ahora a ver si puede mantenerse en Primera División. Hay una gestión pésima durante diez años”, añadió
Exentrenadores
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Quién mejor para opinar sobre la crítica situación que atraviesa el Valencia que los propios entrenadores que han sido engañados y maltratados por Lim en los últimos años. Uno de los primeros en avisar fue Cesare Prandelli, que expresó que se “había sentido engañado” por los dirigentes del club desde su llegada, lo que provocó su dimisión apenas tres meses después de su llegada.
Tampoco se quedó callado Marcelino García Toral, entrenador del último título que luce en las vitrinas de Mestalla. Recientemente, en una entrevista, desnudó la situación vivida en su marcha: “Toda la historia de ese club no va acorde a esa dirección. Nos faltó el respeto. Ese tipo de personas que no se atreven a decirte a la cara lo que realmente piensan, pues a mí no me merecen ningún respeto, la verdad. Cuando actúas por capricho y sin establecer una idea lógica de construcción de un club… Para mí fueron situaciones penosas a nivel humano y profesional. En cierta medida jugaron con nuestra profesionalidad. Fue un capricho. Cuando tú forma de relación es la mentira, transmitirte un proyecto y luego decirte todo lo contrario… Decirte a la cara esto y coger un avión y ejecutar todo lo contrario me parece…”, explicó el asturiano.
En la misma línea del “engaño” que argumentan Prandelli y Marcelino se mueve Javi Gracia. El técnico español, que únicamente dirigió gran parte de la temporada 2020/21, afirmó que “me sentía engañado y no era lo que me habían dicho”. Gracia habló de «situación de desgobierno» y explicó que «Fue una situación que deportivamente no teníamos un nivel que todo el mundo esperaba y que el Valencia mereciera. Así lo manifesté antes de comenzar la temporada», pero no encontró respuesta de Lim, que ese verano no autorizó ningún fichaje para el equipo.
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Otro de los afectados fue José Bordalás, entrenador en la temporada 2021/22, también cesado por Meriton. El alicantino expresó que «a pesar de estar poco tiempo, percibí peligro. La dinámica era muy compleja, muy distinta a lo que debe ser el Valencia CF. También dejó claro que en Mestalla contó con “una de las plantillas más debilitadas de los últimos años”. Incluso Gary Neville, cuyo trabajo en Mestalla estuvo muy lejos de ser bueno, retrató a Peter Lim confesando que no estaba preparado para el cargo, pero aceptó por no defraudar al singapurense. Una prueba más del desconocimiento futbolístico del propietario valencianista, cuyas decisiones deportivas desde que llegó se basan en engaños, sinsentidos e intereses personales y económicos más allá del bien del equipo.