El Espanyol recibe este sábado a Osasuna (14:00h) con la necesidad de volver a sumar en el campeonato liguero. En ese sentido, Manolo González afirmó que tanto los futbolistas como el cuerpo técnico están “jodidos y preocupados” por la situación del equipo, en puestos de descenso, y trabajan para cambiarla cuanto antes.
La reflexión del preparador, en rueda de prensa en el RCDE Stadium antes del duelo contra el conjunto rojillo, llegó tras la pregunta sobre una declaración de Alex Král de este jueves, donde el checo apuntaba a la necesidad de dejarse de bromas.
“La gente está fastidiada y los futbolistas, por su interés, quieren que esto vaya bien”, añadió Manolo González, zanjando cualquier duda al respecto. Además, el técnico blanquiazul insistió en que nadie está “de broma ni de cachondeo, más bien todo lo contrario”.
Por otra parte, el técnico gallego admitió que los profesionales actuales del primer equipo están “arrastrando” lo vivido en años anteriores: “Esto es una obviedad. Hay ese pesimismo y miedo y es lógico que esté ahí porque con muy buenas plantillas el equipo no ha conseguido mantener la categoría”.
En el plano personal, el responsable del banquillo comentó que ya asumía que el año “iba a ser muy duro y que iba a haber momentos de este tipo”. “Cuando ganamos todo es la hostia y cuando perdemos hay ese pesimismo. Trabajamos para preparar el mejor partido posible”, apostilló.
Respecto a las asignaturas pendientes del equipo, el entrenador reconoció que en los últimos encuentros ha faltado “efectividad en las dos áreas” y recordó que contra el Celta (hace dos semanas, 3-1 en el RCDE Stadium) “no fue así” y lograron ganar al conjunto gallego.
Manolo González avanzó que contra Osasuna, el Espanyol debe intentar “ser un equipo agresivo” e intentar mantener la meta a cero. Además, ensalzó las virtudes del rival: “Antes con Arrasate y ahora con Vicente Moreno lo está haciendo muy bien, eso es porque el club tiene estabilidad. Hace un muy buen trabajo“.
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Precisamente, el entrenador indicó que si el equipo lograra “un poquito de regularidad” esto facilitaría que los futbolistas estuvieran “más tranquilos”. “Así tendrían ese punto de confianza que ahora quizá les falta”, apuntó convencido de que jugar en casa es un plus para sus futbolistas.